El liderazgo de personas está íntimamente relacionado con quienes somos.
Me explico: lideramos como somos. Entonces, si no tenemos resueltos nuestros conflictos internos, nuestra manera de liderar a nuestro equipo va a reflejar estos conflictos en forma de mal liderazgo.
Me explico un poco más: si por ejemplo no nos comunicamos bien en general, esto se va a trasladar a la forma de comunicarnos con el equipo. Si no sabemos escuchar bien, y esto incluye tener la mente abierta, no juzgar, no interrumpir constantemente, etc. esto lo haremos con el equipo. Y así no importa cuantos cursos de liderazgo hagamos, la teoría la sabremos de memoria, pero a la hora de ponerla en práctica no lo haremos bien.
Por eso es tan importante el trabajo personal que cada uno tenemos que hacer para poder impactar positivamente en los demás, y si tenemos una posición de liderazgo, o de la manera que sea tenemos que dirigir personas, es como que estamos moralmente obligados a mirarnos primero para poder hacerlo bien.
En este sentido, un proceso personal de coaching puede marcar la diferencia entre un buen líder y otro que aunque haga muchos cursos no acaba de resolver su problemática personal simplemente porque no la ve.
Para poder hacer un cambio lo primero es la toma de conciencia. ¿Si no percibimos que hacemos algo mal, por qué lo vamos a cambiar? Y para poder tomar conciencia hay que ir un poco más allá y mirarnos hacia adentro y muchas veces hace falta la mirada del otro, ese que nos hace de espejo, que nos ayuda a pensar, a mirar desde otra perspectiva, a replantearnos las cosas que hacemos, cómo las hacemos y por qué las hacemos de esa forma.
Hoy en día en las empresas se está prestando más atención al desarrollo de las personas, y de sus líderes.
Este, por tanto, debería ser un punto a tomar muy en cuenta.
¿Has hecho algún proceso de autoconocimiento y desarrollo personal? ¿Lo has hecho por tu cuenta o impulsado por tu empresa?
Si crees que te puede interesar, puedes contactar conmigo para más información.